Ya no quiero sostener tu mirada que condena, sentencia y entierra. Me apena que el huracán sólo arrase la estructura. Es el camino más rápido para justificar el dolor... Doy paso a una reflexión que al menos sirva para fortalecerte, pero acomodas el cuerpo según las circunstancias. No puedes mirar afuera sin reconocer tu adentro. Te empeñas borrar en un discurso de diez minutos, la vida de veinte años. Fiel a tu impaciencia y cuadratura, me ofende tu certeza de entrega y comunión.
Trampas... se pueden mover las fichas o dejar el tablero con la partida iniciada. Ese riesgo necesita la audacia que no tienes. El peligro de los cambios te inmoviliza y acobarda.
Más trampas... mentiras cómplices y en silencio. Dos... no sé cómo decirlo. Deja de restar en tu cómodo encierro. Me aburre...Por derecho o por revés... aunque te joda... siempre son dos.
Trampas... se pueden mover las fichas o dejar el tablero con la partida iniciada. Ese riesgo necesita la audacia que no tienes. El peligro de los cambios te inmoviliza y acobarda.
Más trampas... mentiras cómplices y en silencio. Dos... no sé cómo decirlo. Deja de restar en tu cómodo encierro. Me aburre...Por derecho o por revés... aunque te joda... siempre son dos.
Me voy - Gloria Stefan